domingo, 13 de enero de 2013

En una cueva me hallo...

En una cueva me hallo
ni solo ni acompañado,
día tras día
busco una salida.

Cuando cae el Sol
la roca está fría,
me encuentro descalzo,
la soledad se aproxima.

En este tiempo 
poco puedo hacer
aparte de tumbarme,
esperar el amanecer.

Si sobrevivo al frío
habrá que levantarse de nuevo,
habrá que echarle valor,
hacer un rodeo.

Miles de enemigos asoman
por el día en esta cueva,
no hay que fiarse de nadie
nunca sabes lo que te espera.

Cuando consigo ver una luz,
parece una salida
la felicidad me invade
parece el fin de la pesadilla.

Cuando todo claro parecía
miles de obstáculos obstruyen la
salida,
no parece culpa mía
 a pesar de mis lamentos y agonías.

Cuando me recupero,
decido seguir investigando,
pero otro día será
la noche otra vez me ha alcanzado...