La gente del sábado noche

   Sábado de verano, esos días tan deseados de septiembre a junio, y que son la base de tus anécdotas. Hacer el perro todo el día hasta que llega la hora de prepararse para darlo todo esta noche. Tu camisa preferida, tus pantalones más cómodos y esas zapatillas que te compró tu madre la semana anterior esperando a ser estrenadas. Te haces el pelo con gominilla, un poco de desodorante (suponiendo que te has duchado antes, cerdo) y una pizca de colonia si te motivas. Todo esto en 5 minutos está hecho (si eres tía multiplicalo por 24856148469696969696925864861 veces y cámbialo a horas) y ya estás listo para triunfar esta noche!
   Por fin llegas al donde la fiesta manda y te empiezas a fijar en la gente; y es que las personas cuando van de fiesta, se pueden clasificar en una gran diversidad de especies. Empezemos...
   Una especie bastante reconocida en este habitad son las niñas que van borrachas con medio chupito de agua, y digo medio chupito de agua, si, porque si las engañarais diciéndoles que es un chupito de verdad, estarían "to pedo" igualmente. Como veis esta especie no cuenta con mucha inteligencia, pero allá ellas si les gusta hacer el ridículo.
   Otra especie autóctona de estas zonas son los llamados "cepillos". Supongo que os preguntaréis..¿que coño dice este?, pero si amigos, son fácilmente reconocibles debido a que siempre van en manada y, debido a su "gran" personalidad, van todos EXACTAMENTE con el mismo peinado: los lados y detrás rapados completamente y un pelo de punta de 20 cm mínimo...¿a qué os recuerda?..pues eso. Se puede decir que es un subgénero del cani.
   Pasamos a un género internacional pero nacionalizado por nosotros a un único nombre, los guiris. Sea inglés, alemán, francés, checo, ruso, de narnia, DA IGUAL, son todos y siempre serán guiris. Estos son los que más le dan a la bebida a todas horas, da igual que sean las 10 de la mañana, las 2 de la tarde o las 3 de la madrugada, ellos vienen para eso, aunque creen dificultad para los meseros que ya tienen bastante con entenderles sobrios.
   Estos suelen ser de los casos más llamativos y más comunes y aunque parezca mentira, también hay gente "normal" y son la mayoría. Pero, ¿que es normal? Tengo que admitir que sin esta gente no sería igual y que la mitad de las anécdotas del verano són gracias a las locuras que cometemos así que, gente, si queréis pasarlo bien y pasar momentos inolvidables, guardaros la normalidad para otro momento que en el fondo todos tenemos nuestro yo "alocado" y que mejor momento que demostrarlo en un sábado noche...de verano.

PD: Se agaradecería que dejarais algún comentario de qué os parecen estas historias...¡que el teclado no muerde! ;)