sábado, 28 de abril de 2012

Restaurantes de "lujo"

Domingo, también llamado "dia de transición" ya que no haces nada pensando en el amigo lunes. Tu familia decide ir a comer a un restaurante, bien me librará del estudio unas horitas. Y además NO es un restaurante cualquiera, tu querida abuela ha decidido ir a uno de ¡Tres tenedores! No tienes ni puta idea de lo que significa pero bueno, suena bien. Llegas, te acomodas y sonríes pensando en el banquete de lujo que te vas a pegar. Viene el camarero:- Monsieur, ¿que desea para beber?- - Mmm pues traigame un vino reserva del 82 con....una mierda, tu te vas a pedir la cocacola( que no pepsi) o fanta de turno que te puedes beber al volver a casa. Cuando tienes tu ansiado líquido que te acabas en medio minuto toca leer la carta de comida. La carta es más compleja que el libro más largo que te hallas leído en tu "culta" vida. Comienzas con los aperitivos...hombreeee ¿ Quién eres tu sin los calamares, croquetas, las bravas que siempre pides pero no te comes porque pican, el queso, jamón....nada de eso, en la carta pone claramente " rase de trotmont con una pizca de salmejo a la beichamel....37€. Ostiaaa, esto tiene que ser un banquete que vamos, creo que ya sobra. Pobre ingenuo...tras media hora cotilleandole la "BB" (Blackberry, para los que no siguen esta tan "enriquecedora" moda) llega tu plato tapado. Me voy a chupar los dedoosss...el camarero saca la tapa y ... ¡Surprise!, ante tus ojos una gran obra culinaria de medio centimetro pero eso si, el plato está cubierto de beichamel. Te acabas tu "rase de trotmont" que hace un efecto revertido en tu organismo; tienes más hambre que antes...hay benditas hamburguesas de 1€... Los siguientes platos se repite la misma historia pero ya sin ilusión. Llegas al postre con ganas de irte a casa ya a comerte unas galletas aunque sea; en la carta empiezas a leer con cierta dificultad el nombre de los postres y de repente tu cara cambia radicalmente..¡Acabas de leer "helado de chocolate"..CHOCOLATE. Definitivamente no está todo perdido hasta que llega el camarero y te dice " lo sentimos monsieur, pero no quedan helados de chocolate, sin en argo si quiere tenemos berenjena helada con..." nananana guárdate tu saliva para cosas útiles chaval que tu berenjena te la comes tu luego si quieres después de meterte el rase por el c...Bueno, cuando llega la cuenta te da por apenarte de tus abuelos y no es para menos, acaban de gastar media pensión en " berenjenas congeladas". Tócate los cojones ( ovarios o ambos en algunos casos). Después de salir de ese horrible lugar, no sin dejar propina (para colmo) a la que tú haces un amago de cojer las monedas, creyéndote gracioso y que arranca unas risas de tus tíos por compasión más bien; en el camino de vuelta a casa pasas por burguers y mcdonalds para más inri. Llegas a casa y te nutres a base de dulces y mientras vas pensando ¿Porqué le llamron a eso restaurante de lujo? Y es que así va el mundo...

sábado, 21 de abril de 2012

Malditos insectos

Como todos sabréis (y desearéis) se acerca el verano. Esa estación del año en la que puedes ir a la playa a bañarte o a tomar el sol, ir a la piscina, salir todo lo que te dé la gana...paro ya que si no lloraré de la emoción. Pero, como todo, nuestro querido verano tambien tiene sus contras y es que nada es más molesto en este puto Universo ¡que una puñetera mosca cojonera! Imaginad que estáis en vuestra casa, muriéndoos de calor y sudando como cerdos, cuando de repente notas una ligera presencia en tu desnudo brazo, giras la cabeza y ves ese diminuto bicho insignificante y le miras con una sonrisa. Piensas, ha llegado tu hora querido bicharraco....lo subestimas...y mucho. Te dispones a machacarla con un movimiento digno del mismísimo Bruce Lee..pero nada, a la mosca le da tiempo a reirse en tu cara antes de escapar. Y te dices a ti mismo, no pasa nada, al menos ya no me molesta... Y ¡UNA MIERDA! Antes de que te des cuenta ya tienes de nuevo a la pesadez en tu brazo, y viene acompañada, tu querida mosca ha decidido llamar a una amiga suya para tocarle los cojones a "este ingenuo humano". Y es en este momento cuando tus ganas de matar aumentan exponencialmente (lo buscais en el diccionario, incultos), te levantas del sofá y comienzas a bailar una especie de tectonic raro que si tu madre te ve seguro que piensa: "ya decía yo que tenia aires de retrasado...". Bueno y dejando atrás a esta especie que no sirve absolutamente para NADA, quien sepa la función de la mosca en la Tierra que me lo diga (aparte de tocar los cojones claro); vamos a pasar a otra especie de bicho que puede ser incluso más jodido que el anterior y que también asoma su diminuta cabeza en verano...el mosquito. Estas criaturas joden más cuando eres pequeño/a pero igualmente sufres cuando te haces mayor. Te vas a dormir tranquilamente después de un "intenso" día de vacaciones y al cabo de un rato empiezas a conciliar el sueño...bzzz, un maldito zumbido te devuelve al mundo real y te hace cagarte en todo lo existente. La primera vez pasas olímpicamente ya que el sueño puede con todo pero, un rato después, lo vuelves a escuchar y esta vez tienes la sensación de que se te ha metido en la oreja (es una de las peores sensaciones que se pueden tener) y decides levantarte haciendo un esfuerzo increíblemente sobrehumano y enciendes la luz...cuando recobras la vista empizas a buscar a ese jodido cabrón. No está...no está, ha desaparecido, se ve que se vuelven invisibles con la luz y esto te cabrea más aún porque te has levantado para nada. Decides volverte a dormir y pasar de todo pese a que vuelves a escuchar ese maldito zumbido.     Al día siguiente te despierta el picor insoportable de varias partes del cuerpo. Notas bultos en todas esas partes y comienzas a contarlos...unas 20 o 30 picaduras (casos extremos) y bajas a comer ya que has decidido levantarte pronto y solo són las 2 de la tarde. Y cuando te ve tu madre te dice: "Oh, parece que ha habido un mosquito esta noche en tu habitación"...a ostia mamá, gracias por decirlo de verdad si no llega a ser por ti no me doy cuenta... Fuera coñas, estas picaduras tardan un tiempo en desaparecer, hasta que otro puñetero mosquito decide volver a picarte. Y voy con el tercer y último bicho inservible, la avispa. ¿Dónde coño se esconden en invierno? Científicos creen que estos són los creadores de la 4ª dimensión que es donde traman sus planes para en verano hacerle la vida imposible a todo humano que se precie. Las moscas fastidian, los mosquitos pican, pero es que la picadura de una avispa JODE mucho y más si eres alérgico. Hay dos tipos de avispas: las solitarias (que són más pacíficas) y las gitanas. A estas últimas les pongo ese nombre porque siempre que vienen a atacarte sin motivo alguno y defendíendote, les rocías con agua o algo para ahuyentarlas, segundos después viene con sus preemah y lo único que puedes hacer es correr por tu vida para no ser masacrado a picotazos.
   Al final llega un momento y te das cuenta...ya no hay tantos bichos, vas a poder disfrutar bien del verano por fin. Pero no querid@ chaval/a, es septiembre y se te ha acabado el chollo.

jueves, 12 de abril de 2012

Las madres siempre ganan

  Si...como bien habéis podido pensar por el título hoy voy a hablar sobre esas discusiones que, por nuestra parte, nunca llegan a ningún lado, es decir, somos los eternos perdedores y eso NUNCA va a cambiar. Siempre tienen la última palabra, tienen el poder de jodernos infinito y saben perfectamente como hacerlo. Podrás ganar una discusión a un amigo, podrás ganarla a tu herman@, a lo mejor la podrás ganar a tu padre (suelen ser más pasotas), podrás incluso ganarla a un profesor (poco probable), pero nunca, NUNCA, la podrás ganar a tu madre. En ese momento en el que te crees vencedor, nada pueda hacerte perder este momento de gloria y vayas a publicarlo en tu estado de facebook, tuenti, etc....tu madre sacará el último recurso, ese recurso contra el que no puedes hacer nada mas que callarte y asumir tu derrota...otra vez.
   Bueno, después de esta introducción tan desalentadora (a la vez que verdadera) vamos a poner un ejemplo típico de este tipo de desgracias caseras.
   Imaginad que un día estáis tan tranquilos, en el sofá relajados, después de una deliciosa comida...(preparada por tu madre todo hay que decirlo) y de repente se oyen unos gritos que provienen de otra parte de la casa pero que son suficientemente altos para despertar a todo el vecindario a la hora de la siesta. Claramente provienen de tu madre y de tu herman@ pequeñ@ discutiendo por a saber qué esta vez; es en este momento cuando decides tú, ingenuo adolescente, intervenir en la discusión que se está llevando a cabo y, da igual lo educado que estés siendo, siempre vas a acabar mal. "Mamá puedes bajar la voz ,por favor, que quiero descansar un rato que luego tengo que ir a estudiar (véase entrada anterior)". En este momento oyes un silencio, lo suficientemente incómodo como para saber que algo va mal, y te temes lo peor. Efectivamente, llega tu madre delante de ti y te pregunta con esa cara que cualquier chaval/a con uso de razón odia y te pregunta: "¿Le estás mandando callar a tu madre?". A partir de este momento ya la has cagado pero bien, digas lo que digas NO HAY SOLUCIÓN pero al menos intentas ser educado luchando por tus derechos como hij@: " Tengo que descansar un poco mamá, no he dormido casi en toda la semana ya que estoy en época de exámenes". Antes de que te de tiempo a respirar, tu madre te suelta la parrafada más típica que hay para un adolescente; que si eres un vago, que si llevas todo el puñetero día en el sofá (llevas 35 segundos sentado), que si te pongas a lavar los platos, ves a sacar las basuras, haz tu cama, limpia tu habitación...bueno, bueno,bueno mamá si quieres voy a por un boli, pero no para apuntarme lo que me dices, si no para pintarte el bigote de general que es lo único que te falta. Esto, claramente, no se lo decimos porque nos podríamos despedir de la luz del día en vacaciones, pero puede que lo pensemos muy alto, tan alto que quizás se nos escape alguna palabrita que otra, esas que solo las madres y los murciélagos tienen el oído tan desarrollado como para escucharlas. Si no la habías cagado antes, ahora si que puedes empezar a rezar. Coge el paraguas porque van a empezar a caerte por todos los lados....ERES UN MALEDUCADO, NO RESPETAS A TU MADRE, SI ES QUE TENDRÍAS QUE APRENDER DE TU HERMAN@ ( esta duele...duele mucho, ya que no se acuerda de que hace 5 minutos estaba discutiendo con él/ella y ahora te esta mirando desde un rinconcito de tu casa, con esa sonrisa tan maliciosa en su cara), TÚ NO CONOCES LA VERGÜENZA, AHORA MISMO TE VAS A TIRAR LAS BASURAS Y LUEGO TE VAS A TU HABITACIÓN Y NO TE QUIERO VER HASTA LA CENA, ¿ ME HAS OÍDO?
Más te vale contestar a esta pregunta afirmativamente, a pesar te que te duela en el alma, si no quieres certificar definitivamente tu muerte. Vas a sacar las basuras, desahogándote con cualquier cosa se cruza en tu camino (si pillas un gato mejor...no,....es broma) y vas susurrando de todo menos guapa refiriéndote a tu madre pero tienes que tener cuidado porque tu madre estará muy atenta de lo que haces, hasta que llegues a tu habitación. Cuando vuelves a casa, llegas a esta (no sin antes recibir cuatro o cinco gritos más de tu madre y pasando por la habitación de tu herman@, que estará descojonándose de ti) y piensas que por fin vas a poder descansar. Te metes en la cama, te arropas un poquito, y comienzas a dormirte....pero en este maldito instante...suena la alarma....son las 6 de la tarde, hay que ir a estudiar....

lunes, 9 de abril de 2012

Una de estudio

   Después de todos estos años de estudio (y los que quedan) he aprendido muchas cosas (si, que al rato se olvidan, pero bueno, aprendidas están) pero ninguna, repito, ninguna es como la de lo interesante que se vuelve una simple bola de goma cuando tienes un examen al día siguiente. Esa bola que en su día, hará unos 10 años, compraste en cualquier centro comercial y que ha conseguido captar toda tu atención hasta que te das cuenta de que tienes que empezar a abrir los libros. Nos acomodamos bien en la silla y abrimos el libro, el primer paso está hecho. Después de una rápida miradita a los temas que van, el estudiante cree oportuno ir a por algo para comer, ya que después del gran esfuerzo hecho se merece una recompensa. Entonces es cuando nuestro querido ordenador se cruza con nuestra mirada de vuelta de la cocina y no podemos reprimir nuestras ganas de ver cualquier gilipollez en internet o incluso a pasarnos el buscaminas en el nivel más difícil, todo es bueno. Deespués de una horita y con el estómago lleno, el estudiante cree que ya es hora de ponerse en serio (no sin antes ir al servicio). Entre que no se empieza a estudiar antes de las 6 y todo lo pasado durante este tiempo, se nos hace de noche, es decir, la hora de la cena. Cuando había conseguido dejar de lado todos sus pensamientos y metido de lleno en el estudio, justo en ese momento (allá a las 9 o 9:30) el estudiante recibe un grito, que es como una especie de salvación pero, sin duda, siempre está ese sentimiento de culpa de no haber empezado antes. Por este motivo es por el cual nos comemos el bocadillo o lo que sea que haya para cenar a una velocidad que no estará muy lejos de la de la luz y nos deja esa sensación de no haber comido nada cuando acabamos. Toca volver a la habitación, toca volver a superar esos pensamientos que impiden la concentración, pero se nos cruza de nuevo la mirada con el ordenador...nada hay que ir a estudiar...giramos la cabeza...LOS SIMPSONS! El estudiante cree que por 5 o 10 minutos que esté en el sofá relajado no va a cambiar su nota al día siguiente. Después de mínimo media hora el estudiante vuelve a su habitación, no sin antes hacer una trastada a su herman@ claro está. Conseguimos llegar y vemos el libro abierto por la segunda página, esto nos desanima más aun de lo que ya estamos. Después de volvernos a concentrar (normalmente este es el período que más tiempo pasamos frente al libro) vamos mirando la hora de vez en cuando con desespero. Se hace la 1 y aún te queda un tema y no te sabes bien los anteriore.....¿solución?...claramente todo estudiante tiene que tener un Red Bull en su nevera. LLegamos a la cocina y conseguimos el ansiado líquido y nos lo vamos tomando poco a poco (se puede llegar a tal grado de desesperación y ansiedad y tomárselo de un trago). Estamos desvelados y seguimos estudiando y de golpe a repente se hacen las 3. A partir de esta hora el estudiante comienza a sentir serios síntomas de fatiga que ni el Red Bull puede contrarrestar. Es entonces cuando vienen las cabotadas, esos momentos en los que cierras los ojos por medio segundo y se te cae la cabeza encima del libro hasta que en una de ellas, el estudiante, queda dormido profundamente soñando con el examen del día siguiente....

domingo, 8 de abril de 2012

Una muy buena frase



Aquí traigo una frase que, a mi parecer, es muy buena y que tiene toda la razón del mundo...

" Nunca se olvida a un ser querido, simplemente se aprende a vivir con su ausencia "

Nuevo blog

Este blog lo he creado para que la gente (incluido yo) reflexione sobre una gran diversidad de temas y ya iré actualizándolo poco a poco.
PD: perdonad el nombre del blog pero después de mucho rato la sangre se comienza a caldear y ademas....yo lo veo original...